Además del que proponemos aquí, tenemos otro test sobre este tema. Por aquí también os recomendamos una película bastante entretenida que os puede ayudar.
El tema 41 está dentro del bloque de Historia en el temario, dentro de un grupo de temas dedicado a los grandes cambios del siglo XIX y al fracaso de las relaciones internacionales que desembocó en la Primera Guerra Mundial: tema 38 (Revolución industrial e industrialización), tema 42 (Imperialismo y expansión colonial…), tema 43 (Pensamiento político y económico en el siglo XIX), tema 45 (Las transformaciones del Extremo Oriente entre 1868 y 1949) y tema 47 (La Primera Guerra Mundial…).
Liberalismo y nacionalismo
El sistema democrático que conocemos hoy, basado en los derechos y libertades individuales, hunde sus raíces en el liberalismo político que, si bien tiene antecedentes en el siglo XVIII, cobró forma en el XIX. En el debate ideológico actual tiende a confundirse, quizá de forma interesada, el liberalismo económico con el político. Conviene definir correctamente cada uno de ellos para poder participar en el debate público con conocimiento de causa.
A mediados del siglo XIX el nacionalismo todavía aparecía con frecuencia de la mano del liberalismo, las aspiraciones nacionales de los pueblos incluidos en los grandes imperios llevaban aparejadas las aspiraciones democráticas. Pero acabando el siglo, el nacionalismo ya resultaba un instrumento útil para frenar los impulsos liberales, toda vez que el destino de la nación se imponía sobre los derechos del individuo.
A la vista de la anterior, este tema resulta clave, no solo para entender el siglo XIX, sino también el XX e incluso el mundo actual. Todo opositor que se precie debe alcanzar un conocimiento sólido sobre este tema 41.
Un test para opositores
Os dejamos nuestro habitual test semanal, en este caso con algunos de los acontecimientos clave del periodo que es necesario conocer. Ya sabéis que en este blog tenemos más de un centenar de test sobre todos los temas. Esperamos que puedan serviros para poneros a prueba y para fomentar vuestro espíritu competitivo, así que, ya sabéis, quien pierde paga los cafes. 😉